Existe a cuadra y media de mi casa una panadería con trastornos de identidad; no dura más de 2 años sin que no le cambien de dueños y, por consecuencia, de nombre.
Pero lo curioso no es ella en sí misma, sino el misterioso garaje "abandonado" (o seriamente descuidado) que se encuentra vecino a ella. No importa el tiempo, nunca dejó de emanar su particular hedor... siempre tan pestilente y nauseabundo.
De chica me hacía preguntas tales cómo la naturaleza del olor asqueroso.
Excremento de ratas, gatos, y por qué no, un cadáver.
Hoy, lamento no tener un dispositivo que no me haya permitido capturar el "momento", pero, en ese sitio, o en "su puerta", había 6 cabras "pastando" del cordón verde de la vereda.... a un par de metros de la transitada avenida que conduce a los caminos "Belgrano" y "Centenario" que unen a La Plata con City Bell.
Quizás solucioné el misterio de lo que producía el olor desagradable o quizás tomé un mate con yerba de origen extraño, pero juro por mi vieja que las vi.
2 comentarios:
qué garrón descubrir el misterio... yo me hubiera quedado con la idea de que era un cadáver.
Jajaaa mirá vos! y dónde guardaban el auto, en un corral?
Muy bueno el blog y gracias por linkearme, te agrego a mi lista yo también, nos seguimos leyendo!! :)
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