jueves, 22 de enero de 2009

Sin palabras

En 1992, se celebró en Río de Janeiro, el "Earth Summith". Allí, una niña de tan solo 12 años, quien a sus 10 años había fundado ECO (Environmental Children’s Organization), subió a pronunciar uno de los mejores discursos pronunciados en la ONU, la audiencia compuesta por altos cargos mundiales, quedó atónita.



Diez años despuñes, se graduó en biología evolutiva y ecología por la Universidad de Yale, ayudó a crear el think-tank “The Skyfish Project”, además de participar en la comisión asesora especial de Kofi Annan para cuestiones de medioambiente. Su nombre es Severn Suzuki.

4 comentarios:

Rho dijo...

Muy interesante.
Cambia a 1992.

Romina dijo...

tremeeeeeeeeeeendo la nena!
y que lección a los adultos no?
beso.

Jorge dijo...

Y nada, abslutamente nada ha cambiado, correccion, si lo han hecho!!!; de hecho se han complicado bastante las cosas.

FAB dijo...

El discurso es, a mi sorpresa, tan realista como emotivo. Confieso que entré con dudas (principalmente basadas en el origen "acomodado" de la muchacha) pero ella, con sus palabras, admite lo determinante que es el lugar en donde nacés. Esa afirmación, de algún modo, "limpia" el discurso de egoísmo, exotismo y caridad. Vamos, es probable que la niña haya llegado allí gracias a unos padres ricos o intelectuales (sería ridículo atorgarle a la nena el status de genia nacida), no obstante, sus comodidades anteriores se redimen en el compromiso de hoy (es crucial el dato que agregaste, de que se recibió de algo coherente a "su causa", y de que lucha cada vez más). Podría, tranquilamente, optar por no hacer nada.
En definitiva, propongo menos aplausos a la niña (que, admito, es impresionante como oradora), y más hacia el compromiso.
Abrazo con mis más sincero amor la causa ambiental, pero ojo: como sabemos, no es sólo una batalla de salones y comités.
Besos.