Allí estabas, muy metido en lo tuyo. Sentado en la mesa de un bar que conociste aquel mismo día, cansado de la rutina del viernes, tus planes cancelados por un capricho de polleras... ¡Qué mala vida!.
Entonces, la puerta se abrío, y los ángeles cantaron un adaggio. Había entrado un ser celestial, una Venus de Milo animada.
Bajaste la mirada y prendiste un cigarro, no tenías coraje de volverla a mirar. Pero ella te vió, y enseguida se acercó a pedirte fuego.
No, no era celestial, era el mismo fuego hecho mujer... Hermosa, Valiente, Seductora... eso te gustó.
Algo le dijiste y ella te sonrió, pidieron unas cervezas, cada sorbo, era un gesto que te atraía más y más, sus labios te pedían a gritos los tuyos.
Como impulsado por el mismo demonio, te atreviste a besarla, con frenesí, y ella te respondó con la misma pasión.
La miraste a los ojos, y algo te incomodó, había algo allí, un extraño misterio, un secreto bien guardado.
Le preguntaste, pero ella guardó silencio... y su sonrisa se tornó una mueca de burla.
Ya era tarde, demasiado quizás. No podías quitártela de la cabeza, bastó un beso, pero cada vez te volvías adicto por ellos, querías más, aunque por cada uno ibas perdiendo parte de tu alma, que la bebía a sorbos, cada bocanada de humo que exhalaba, te acercaba más y más al infierno.
Qué importaba, ella era tuya, o tu, éras de ella.
Dicen que el homo sapiens sapiens, es la ùnica especie que tropieza con la misma piedra, que conociendo el peligro, se arriesga.
La palabra Veneno, deriva de la romana Venenum, ésta, a su vez, se la atribuye a la Diosa romana "Venus", y era la denominación bajo las que se catalogaban todas aquellas sustancias que se elaboraban como posiones de amor o bien como estimulantes sexuales... hoy, a esos productos, se los llama afrodisíacos (derivado, a su vez, de la misma diosa pero con nombre griego).
Poison, también viene del Latín, en realidad, primero pasó al francés "puison", pero la latina es Potio, era como nuestra denominación de "Posión", una bebida de atribuciones "mágicas".
Tóxico, tiene on un origen también curioso, ya que deriva de Toxon "punta de flecha" en griego, referido a la forma de batallar de aquellos siglos o bien (¿por qué no?) la forma en que Eros o Cupido, hacían sus travesuras con los mortales, enfermándolos de pasión.
Mi buen amigo Suizo Philippus Aureolus Bombast von Hohenheim, más conocido como Teofrasto Paracelso, decía en el siglo XVI "Allein die Dosis macht, daß ein Ding kein Gift ist", (LA dosis hace al veneno), en definitiva todo, en exceso te conduce a la muerte.
Gracias a éste médico alquimista, es que se cataloga dentro de ésta categoría, a los venenos convencionales y a todos aquellos que en dosis, son letales.
Ya nuestros antepasados consideraban al amor como un mal, una enfermedad, un veneno...
¿Qué tanta razón tenían?
5 comentarios:
que duda cabe que el amor es un veneno que nos consume en cada encuentro (o desencuentro)
pero como toda droga quecrea adiccion es imposiible dejarlo sin ayuda
(curiosamente, de otro amor, queprobablemente nos envenenará tanto como el primero)
y así..
me voy a los saltos con los fabulosos (Grax por su visita, BUEN FINDE!!)
♪♪♪ no quiero morir sin haber amado pero tampoco quiero morir de amoooor ♪♪♪♪♪♪
Buen título, buen post. Me hace acordar a algo, pero no sé a qué. El súcubo entra autorizado. Somos responsables de caer. Pero vale la pena. Por favor, que pongan a Poison en SFIV.
Es un veneno, pero el mas dulce y prodijioso que, con placer, nos transporta hasta abandonar nuestros cuerpos!!
besote!
Idem Briks.
Es un veneno, pero se necesitara otro mas poderoso para sacarlo...
se mata y se muere por amor, no conozco ninguna otra cosa con tanto poder, a si me acorde! el dinero...
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